lunes, 29 de octubre de 2007

¿Existen los alimentos inteligentes?

De más está decir que la alimentación es la base de la vida. En los últimos años, la ciencia se ha dedicado a investigar la relación que existe entre ciertos alimentos y la prevención de algunas enfermedades y se ha concluido que existen algunos componentes permiten optimizar las condiciones físicas y mentales.

Algunos alimentos como las leches, la soja o las harinas pueden resultar realmente beneficiosos para la salud. Esto se debe a las transformaciones que han sufrido en los último años a causa de adelantos tecnológico y biológicos que los han enriquecido hasta darles la categoría de “funcionales”.

Hoy en día, con la competencia entre las empresas dedicadas al rubro alimenticio, cuya meta es ofrecer el producto más sano para atender las necesidades de los consumidores de verse saludables, las ofertas dentro del supermercado puede resultar confusa y más porque quienes van de compras no tienen porqué hacer una lectura técnica de cada etiqueta. Por eso, a continuación le detallamos algunos nombres con los que se puede encontrar.

Dentro de los lácteos, podemos encontrar ciertas sustancias no digeribles que ayudan a estimular la flora intestinal. Son muy efectivas en caso de estreñimiento y ayudan a prevenir el cáncer de colon.

Otro componente es la coenzima Q10, presente en casi todos los alimentos y muy buen colaborador en la producción y utilización de la energía celular. Interviene, además, en la estabilización de la glucosa en sangre y tiene un efecto preventivo para las enfermedades cardiovasculares.

Los antioxidantes, por su parte, son un grupo de minerales, vitaminas, compuestos vegetales y enzimas cuya principal es combatir la acción de los radicales libres, retardando el envejecimiento de a piel y bloqueando la oxidación de las células.

Obviamente, este tema acarrea diversas opiniones y hay quienes sostienen que estos alimentos no se pueden comparar con los alimentos frescos y que el uso de éstos no se justifica en personas sanas. De todos modos, una consulta con un médico nunca está de más.

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