Varios factores son los que hacen que este tiempo sea propicio para iniciar tratamientos estéticos: el verano, el sol y la arena hicieron estragos en la piel y las bajas temperaturas la secan. Los consejos de una profesional consultada por Infobae.com
Dado que, por lo general, para realizar estos procedimientos es necesario que la persona no se exponga al Asimismo, "es un hecho que en invierno la piel se seca más que de costumbre porque las bajas temperaturas disminuyen la función de las enzimas. Lo que ocurre es que a veces la adaptación de una temperatura a la otra debe hacerse de golpe y en esos casos aparecen condiciones como la extrema sequedad de la piel que puede llegar incluso a producir pequeños cortes. Por esta razón es tan importante ponerse cremas humectantes y productos emolientes que puedan devolverle a la piel las sustancias que ha ido perdiendo para acelerar el proceso de adaptación y permitir que la piel esté sana para que pueda acompañar los movimientos realizados por los músculos", explicó la doctora Carla Castro, jefa del servicio de Dermatología Pediátrica del Hospital Austral.
Consultada por Infobae.com acerca de cuáles son los pasos a seguir para un correcto tratamiento de la piel, la cosmetóloga y esteticista Patricia de Lerma explicó que las personas que tienen acné, con el sol ven su cuadro mejorado, pero después los granitos aparecen de nuevo.
Eso, sumado a los efectos del sol en el cutis, hace que el "peeling o `descamación` con ácidos aparezca como la mejor opción para recuperar la permeabilidad y color de la piel, dado que el sol, además de broncear, macha, reseca y marca las líneas de expresión", aseguró la profesional, quien destacó que este tipo de tratamiento "se hacen a partir del otoño porque no se puede estar en contacto con el sol".
De Lerma es una de las profesionales a cargo del instituto Dermodels y contó que el tratamiento -de una vez por semana- consta de ocho sesiones y "al
Iontoforesis y termoterapia son otras de las alternativas a tener en cuenta a la hora de
El primero consiste en promover la "penetración de productos por medio de un equipo que trabaja por micro corriente hacia capas más profundas de la piel" (si bien se utilizan según las necesidades de cada cutis, las vitaminas C y E aclaran, humectan y activan la piel).
En tanto, la termoterapia ayuda a energizar la piel a través del calor, dado que hace que la sangre fluya más donde se la aplica, "atrayendo más nutrientes a la piel, por lo que es muy efectiva en pieles apagadas o foto envejecidas".
Pese a que la profesional remarcó que los productos son testeados antes de que tomen contacto directo con la piel, aseguró que en las visiblemente sensibles "hay que tomar más recaudos". Asimismo, hizo hincapié en que este tipo de tratamientos "no" están aconsejados a mujeres embarazadas, dada la sensibilidad de las mismas y el hecho de que como la gestación suele manchar el cutis, "se recomienda hacerlos tras el parto".
Factor de protección solar, también en invierno
Aunque en el verano se disfruta y se vive al aire libre, como dicen, el sol siempre está, aún en esos días fríos en los cuales la temperatura apenas si alcanza los 10 o 15 grados. Es por eso que durante los meses de otoño e invierno también hay que cuidarse, sobre todo si las tareas que se realizan transcurren al aire libre.
Colocar un protector debajo del maquillaje -en el caso de las mujeres- es una alternativa viable